Diez tipos de dulces tradicionales Wagashi para probar en Japón

Elmo

Los wagashi son un placer tanto para la vista como para el paladar. Si bien muchos de estos dulces tradicionales deben disfrutarse con una taza de té verde amargo, otros se pueden disfrutar en cualquier momento del día. Estos diez wagashi japoneses por excelencia deberían ocupar un lugar destacado en tu lista de cosas para probar durante una visita a Japón.

Daifuku

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Los daifuku son bolas de mochi suaves y masticables rellenas de pasta dulce de judías adzuki. Un giro moderno particularmente sabroso es *ichigo-daifuku*, donde una fresa entera, ya sea fresca o seca, se mete dentro de la dulce pasta de frijoles rojos, todo envuelto en esa suave capa de mochi. Es una deliciosa mezcla de texturas y sabores, en la que la acidez de la fresa equilibra la dulzura de los frijoles y la suave masticabilidad del mochi.

Castella (Hoja útil)

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Kasutera es un sencillo bizcocho que llegó a Japón hace unos 400 años, gracias a los comerciantes portugueses. Está elaborado con ingredientes básicos como harina, huevos, azúcar y edulcorantes, pero lo que lo hace especial es el toque panadero. Como no contiene levadura artificial, la textura y el sabor del pastel dependen completamente de la habilidad del panadero. Cada panadería tiene su propia versión y algunos panaderos han pasado toda su vida perfeccionándola, por lo que encontrarás diferencias sutiles en el sabor dondequiera que la pruebes.

dango

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Los dango son tan simples como parece: solo harina de arroz y agua, pero hay algo realmente reconfortante en ellos. La masa se cuece al vapor y se machaca, dándole esa textura masticable, parecida al mochi, pero hecha con harina en lugar de arroz integral. A veces agregan otros ingredientes para darle un toque de color o sabor. Puedes encontrar dango dulce, salado o incluso un poco de ambos. Es un refrigerio humilde, pero que definitivamente da en el clavo.

Dorayaki

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¡Dorayaki es algo que debes probar cuando estés en Japón! Estos deliciosos bocadillos contienen pasta de frijoles dulces entre dos panqueques esponjosos. Las tortitas tienen una textura similar a la tarta de castella pero son un poco más densas y esponjosas. Lo bueno es que hoy en día puedes encontrar una variedad de rellenos, desde la clásica pasta de frijoles dulces hasta opciones interesantes como batata y crema. ¡Es el dulce perfecto para disfrutar en cualquier momento!

Mónaco

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Monaka presenta una deliciosa cáscara crujiente hecha de una fina capa de mochi al que se le ha dado forma y horneado a la perfección. Tradicionalmente, se rellena con pasta de frijoles rojos o blancos endulzada, pero también encontrarás algunas variaciones interesantes como helado, natillas y shirotama, un tipo de dango. ¡Cada bocado es una mezcla divertida de texturas y sabores, lo que hace que la monaka sea una delicia que definitivamente vale la pena disfrutar!

nerikiri

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Nerikiri tiene tanto que ver con el atractivo visual como con el sabor. Hechos con una mezcla de ñame chino, harina de arroz y pasta de frijoles blancos endulzada, estos wagashi vienen en formas bellamente elaboradas que son perfectas para Instagram. En el interior, a menudo encontrarás una dulce sorpresa de pasta adzuki. Lo que realmente distingue a nerikiri es cómo sus diseños reflejan los cambios de estación, haciendo que cada pieza se sienta especial y ligada a la naturaleza. ¡Disfrutar del nerikiri es como saborear una pequeña porción de arte!

Cardo

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Estos deliciosos wagashi otoñales están elaborados con arroz glutinoso al vapor, a menudo denominado arroz mochi, combinado con pasta adzuki endulzada. El proceso consiste en enrollar el arroz en bolitas pequeñas y divertidas y luego cubrirlas con una variedad de deliciosos aderezos, como azúcar, semillas de sésamo molidas o harina de soja tostada (kinako). ¡Cada bocado ofrece una reconfortante mezcla de texturas y sabores, lo que los convierte en un regalo perfecto para disfrutar mientras las hojas comienzan a cambiar!

Mochi Warabi

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El warabi mochi es un delicioso manjar de verano elaborado con azúcar, agua y almidón de raíces de warabi, un tipo de helecho. Después de cocinarlo al vapor, se corta en trozos pequeños y se espolvorea con kinako, una harina de soja tostada que le añade un sabor a nuez. Con su textura masticable y gelatinosa, el warabi mochi es una forma refrescante de disfrutar del sabor de los dulces tradicionales japoneses en los días cálidos.

Wasanbonto no Uchigashi

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Este wagashi lleva el nombre de "wasanbonto", un azúcar especial exclusivo de Japón. Se elabora mezclando agua con wasanbonto y luego presionando la mezcla en moldes de madera hasta que esté firme y seca. Lo realmente divertido es la infinita variedad de formas que puedes encontrar, desde peces y flores hasta monumentos famosos y objetos cotidianos. Cada pieza no solo es sabrosa sino también una pequeña obra de arte, lo que las convierte en un placer tanto para el paladar como para los ojos.

yokan

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Yokan es un delicioso postre gelatinoso elaborado con pasta de judías adzuki endulzada y agar-agar, un agente gelificante procedente de algas rojas. La mezcla se disuelve en agua caliente y luego se enfría en un molde hasta que se convierte en una delicia espesa y satisfactoria. Puedes encontrar varios sabores, incluyendo matcha, frijoles rojos enteros e incluso castañas. ¡Cada versión aporta un toque único, lo que hace del yokan un refrigerio versátil y agradable para saborear en cualquier momento del día!

En conclusión

Los wagashi japoneses tradicionales son una combinación deliciosa con una taza de té verde amargo, equilibrando maravillosamente la dulzura. ¡Pero no te limites sólo a la hora del té! Estas delicias se pueden disfrutar a cualquier hora y también son fantásticas acompañantes para el café de la mañana. Ya sea que los saborees con té o café, el wagashi siempre aporta un toque de dulzura a tu día.