Ciudad Patrimonio de la Humanidad de Marruecos: Rabat – Capital moderna y ciudad histórica, un patrimonio compartido

Elmo

La ciudad más grande de Marruecos es Casablanca, pero su capital se encuentra al noreste, en Rabat. En términos de población, ocupa el tercer lugar en el país. Como Marruecos es un reino, Rabat alberga el palacio real y, aunque Casablanca es el centro comercial y financiero, Rabat alberga importantes instituciones políticas.

Rabat está registrada como Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO con el nombre "Rabat: capital moderna y ciudad histórica, un patrimonio compartido". Normalmente, en el caso de las ciudades históricas, sólo se inscribe el casco antiguo, pero la designación de Rabat incluye tanto la ciudad antigua como la nueva. Frente al Océano Atlántico, Rabat es un lugar fascinante donde se entremezclan influencias europeas y árabes.

La zona donde ahora se encuentra Rabat albergó una colonia romana, pero luego fue abandonada. La verdadera historia de la ciudad comenzó en el siglo XII, cuando Abd al-Mu'min, fundador de la dinastía islámica almohade bereber, construyó un gran ribat (fortaleza) en 1146 como base para luchar contra las fuerzas cristianas de España y más allá. En 1170 recibió el nombre de “Ribat al-Fath” (Ribat de la Victoria), de donde deriva el nombre de Rabat.

Tras la decadencia de la dinastía almohade en el siglo XIII, Rabat disminuyó al tamaño de un pequeño pueblo. En el siglo XVII fue reutilizado como base de corsarios. Cuando Marruecos se convirtió en protectorado francés en 1912, la capital se trasladó de Fez a Rabat. El urbanista francés Henri Prost reconstruyó la ciudad y la convirtió en la nueva capital, sentando las bases de la moderna Rabat. Después de la independencia de Marruecos en 1956, Rabat siguió siendo la capital y continuó siendo una ciudad donde conviven lo antiguo y lo nuevo.

Nombre: Rabat, capital moderna y ciudad histórica: un patrimonio compartido

Sitio web oficial: https://whc.unesco.org/ja/list/1401

Acceso a Rabat, la capital donde conviven ciudades modernas e históricas

El aeropuerto de Rabat-Salé sirve a las afueras de la capital. Los viajeros deben conectarse a través de ciudades como París, Ámsterdam o Madrid. Desde el aeropuerto hasta el centro de la ciudad, declarado Patrimonio de la Humanidad, se tarda entre 20 y 30 minutos en taxi. La ciudad también cuenta con una moderna red de tranvías, lo que facilita la exploración de los sitios patrimoniales.

El principal aeropuerto central de Marruecos es el Aeropuerto Internacional Mohammed V en Casablanca. Ofrece muchas más opciones de vuelo que Rabat-Salé. De Casablanca a Rabat se tarda aproximadamente una hora en tren, lo que hace posibles excursiones de un día desde Casablanca.

Lo más destacado de Rabat

1. Mausoleo de Mohammed V

Mohammed V fue el primer rey de Marruecos después de independizarse de Francia. Murió en 1961 y su mausoleo se completó en 1973. Aunque relativamente moderno, incorpora arquitectura tradicional marroquí y tallas intrincadas, lo que lo convierte en una de las atracciones más bellas y populares de la ciudad. La luz colorida se filtra a través del techo de vidrieras, mientras que las paredes están adornadas con exquisitos patrones geométricos y lujosos detalles dorados.

Más información:Rabat: una ciudad única que combina modernidad y culturalismo

Inusualmente para un sitio religioso en una nación islámica, se permite la fotografía en el interior. Los dignos guardias montados en la puerta también son un tema popular para las fotografías. Sin embargo, como este es el lugar de descanso de un héroe nacional, se recomienda vestir con modestia.

2. Kasbah de los Udayas

Una “kasbah” es una fortaleza. Utilizando las murallas construidas en el siglo XII por los almohades, el gobernante alauita Moulay al-Rashid construyó esta kasbah en el siglo XVII. Su nombre proviene de la tribu Udaya, cuyos soldados estuvieron estacionados aquí en el siglo XVIII. Dado que "Rabat" en sí también connota fortificaciones y guarniciones, esta kasbah forma el núcleo del patrimonio de la ciudad antigua.

Rodeada de resistentes muros y puertas marrones, la kasbah se puede explorar por dentro. Cerca se encuentran atracciones elegantes como el Museo Udayas, ubicado en un antiguo palacio alauita, y los Jardines Andaluces, que se dice que están inspirados en la Alhambra de España.

La fortaleza costera combina una fuerza imponente con una atmósfera serena en su interior. Sus miradores ofrecen vistas del Océano Atlántico y una playa cercana lo convierte en un punto focal perfecto para un recorrido a pie por el casco antiguo.

3. Palacio Real

En la nueva ciudad de Rabat se encuentra el Palacio Real, hogar de la familia real de Marruecos. Construido en 1864, antes de que Rabat se convirtiera en la capital, el palacio se distingue por sus tejados blancos y verdes. Si bien la entrada al interior está restringida, los visitantes pueden ver las grandes puertas y la espaciosa plaza y jardines al frente.

Los viernes, a veces se puede ver un desfile mientras el Rey viaja desde el palacio a la Mezquita Al-Fa para orar. Esta tradición semanal es un puente entre el antiguo y el nuevo Rabat, y vale la pena presenciarla si tu visita coincide.

◎ Resumen

Rabat, la capital de Marruecos declarada Patrimonio de la Humanidad, tiene una población de aproximadamente 650.000 habitantes, lo que ofrece una atmósfera más tranquila en comparación con Casablanca. Es un gran lugar para experimentar el lado más relajado del país.

Al otro lado del río Bou Regreg se encuentra Salé, otra antigua ciudad fortificada que vale la pena visitar junto con Rabat. Al sur de la nueva ciudad de Rabat se encuentran las ruinas coloniales romanas de Chellah, otro sitio fascinante para los amantes de la historia.